Las manchas en la piel son una de las consecuencias del exceso de sol durante el verano. Una huella en nuestra piel denominada hiperpigmentación. Para tratar con éxito esta marcas solares, es necesario diagnosticar su tipo y conocer la causa de origen que las producen. Te las contamos a continuación.
Tipos de machas en la piel causadas por la exposición al sol
Efélides o pecas
Éstas son de pequeño tamaño y con una forma definida. Su origen viene determinado por factores genéticos. Suelen aparecer en zonas de mayor exposición solar como la cara o el escote, y son mas habituales en las pieles claras. Las pecas aumentan de tamaño con la exposición al sol.
Léntigo solar
Son de pequeño tamaño, con forma redondeada y plano. Aparecen tras un incremento de la producción de melanina en esa zona de la piel que se ha estado al sol. Tienen un color homogéneo que puede oscilar entre el pardo claro al negro. No obstante, son más comunes en personas mayores de 60 años.
Léntigo senil
Manchas pequeñas de color claro que con el tiempo aumentan en número y tamaño, intensificándose su color. Aparecen en las manos y muñecas, sobre todo, con el envejecimiento de la piel.
Melasma
Estas manchas en la piel son placas de color amarillo oscuro, y se dan en la frente, nariz, mejillas, zona supralabial y maxilar inferior. Son debidas a factores hormonales como embarazo, disfunción ovárica, disfunción tiroidea, estrógenos y progestágenos.
Nevus o lunares
Son de tamaño y forma variable, de color negruzco, y pueden presentar pelos. Son una anomalía congénita, pero pueden adquirirse con el tiempo. Si presentaran picor, dolor, exudación o signos inflamatorios, se debe consultar al médico.
Melanosis por fotosensibilizantes
No tienen forma ni color específicos. Se deben a la exposición solar de zonas de la piel que han estado en contacto con agentes químicos ( perfumes, plantas o medicamentos), físicos ( frío, calor, escoriaciones) o mecánicos ( rascadas).
Hiperpigmentación post inflamatoria
Aparecen en cualquier parte del cuerpo, sobre todo, tras un proceso inflamatorio agudo o crónico como herpes, quemaduras o acné. Son más frecuentes en personas con la piel oscura.
¿Cómo debemos cuidar una mancha en la piel o despigmentación?
A la hora de tratar una mancha, primero debemos conocer el tipo de hiperpigmentación que es y eliminar el agente causante. Así, podremos elegir el cosmético que más se adecue a nuestra piel.
Los cosméticos despigmentantes pueden formularse en cremas, sérum, lociones, mascarillas, stick, etc. Actualmente, la mayoría de estos cosméticos contienen una combinación de principios despigmentantes que potencian su acción y actúan al nivel de la síntesis de melanina causante de la mancha.
Entre los principales principios activos destacamos los ácidos kójico, ascórbico, ferúlico y fítico, la arbutina, los ácidos azelaico, lipoico y elágico y, también, la hidroquinona y el ácido retinoico, que no están autorizados en cosmética.
Esta industria investiga continuamente para ofrecer nuevas alternativas para el tratamiento de manchas en la piel, dando lugar a una nueva generación de activos cosméticos despigmentantes altamente tolerables y eficaces que actúan de manera selectiva sobre las manchas. De esta manera, consigue uniformar el tono de la piel sin generar un efecto blanqueador. Entre los más destacados tenemos los siguientes.
- Bellis perennis: extracto procedente de las flores de margarita.
- Genisteína: es la forma biológicamente más activa de las isoflavonas de soja.
- Hexilresorcinol: es un conservante alimenticio.
- Acido fítico: activo presente en la mayoría de los cereales, legumbres, nueces y semillas aceitosas.
Consejos para aumentar la eficacia de los tratamientos despigmentantes
- Los tratamientos despigmentantes no son inmediatos, por eso requieren de constancia. El tiempo de duración no debe ser menor de 3 meses, y se necesitan al menos de 3 a 6 semanas para notar mejoría.
- El tratamiento siempre debe de ir acompañado de filtros de protección solar altos, ya que la radiación es un factor causante y agravante de la hiperpigmentación. Además, se aconseja que se realice en otoño e invierno debido a que la radiación solar es menor.
- Tener una piel sana disminuye las probabilidades de aparición de manchas. Se aconseja realizar una buena limpieza diaria, e hidratar y nutrir la piel.
- También, dependiendo del tipo de piel, es recomendable una exfoliación semanal que potencie la eficacia de los tratamientos, y elimine las células muertas que favorecen la aparición de manchas.
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